Por Hernan Tirabassi.
Era un lunes por la noche allá por el 2007, hacía frio. La reunión pactada en Imperio era necesaria para terminar con los rumores y para que los jugadores de CSIS, que subían de juveniles propongan lo que para ellos era el mejor proyecto del club. Un equipo de buen pie, formado por un excelente grupo de amigos.
Para la dirigencia la idea de una gran primera era la prioridad, dejando de lado el proyecto a largo plazo. Sumando a los mejores juveniles a una Primera B ya armada y con chances de ascenso.
Los chicos no dieron el brazo a torcer y encontraron un apoyo fundamental, la banca del pope, Eduardo Kvetcher. A partir de esa noche, si bien al principio se pusieron algunas piedras en el camino, la nueva Primera C se encaminaba al deseo de estos 20 amigos.
Una de las trabas más escandalosas y que hoy es la carta de presentación de este grupo, fue la de sacarle el título de socio deportivo a cada jugador, para poner a la totalidad del equipo, como un COMBO. En aquel momento, Davico se colgó la mochila en su espalda y se bancó liderar a este conjunto tan caprichoso como ambicioso, con talento, huevos y muy, pero muy, ganador.
Primer partido oficial, contra un elenco de Sosiego, había dudas, si el Combo iba tener la madurez suficiente para arrancar con un promedio de edad tan joven en una primera. Pero ese primer encuentro, fue una fiel imagen de lo que iba a ser el primer semestre. Rotundo 4 a 2 y florecían todo tipo de ilusiones. Dicho y hecho, el Combo ganó caminando el torneo, en el cual solo trastabilló una vez frente a BK, y se despidió de la C con un glorioso 4 a 0 en la final frente a Congregación Hebrea San Martin.
Otra vez rumores, deseos de la dirigencia de meter mano en un equipo del cual se pensaba iba a volver rápido a la última categoría de FACCMA. Pero otra vez la respuesta del Combo fue un claro “no”. Para la dirigencia y para las malas lenguas. Llegando a la última fecha del torneo con la chance de ascender si se le ganaba al otro aspirante, Scholem. Este último sacó chapa y vapuleó a un Combo que le faltó madurez como era de esperar en su primer año como equipo, pero que en un año glorioso empezó en Parque Centenario y terminó subiendo de categoría y luchando por el segundo ascenso en solo 10 meses. Histórico.
Llegó fin de año y algunos jugadores decidieron abandonar, por falta de minutos, de tiempo, de ganas y otros decidieron defender otros colores, pero aún asi hoy son parte de este pequeño homenaje, para un enorme grupo de amigos. Por otra parte otros arribaron al club de Montegrande, y así comenzó una historia más.
Esta vez el Combo se preparaba mentalmente para afrontar una Primera B, y jugadores de experiencia llegaban para vestir los colores sagrados. Con un plantel más corto pero más compacto, este equipo llegaba a la primera fecha como candidato. Una serie de derrotas a mitad de torneo se volvieron verdugo del equipo sensación de CSIS, que finalizaba en la 4º posición a pesar de llegar una vez más, con chances a la última fecha. Mejorando la imagen al final del trayecto con una racha de 6 victorias.
Nuevamente éxodos, llegadas de grandes promesas y peleas con la dirigencia por el tema refuerzos fueron las novelas del verano. Esta vez con una ideología más flexible en cuanto a refuerzos impuestos por la CD, y con el cambio de DT a la cabeza (Davico pasaría a ser ayudante de Milaner), se encaraba el 2009 con grandes perspectivas luego de algunos amistosos con un fútbol muy vistoso y efectivo.
La primer fecha fue catastrófica, derrota de local frente a Mi Refugio por 3 a 0 y las ilusiones se derrumbaban. Pero como siempre a fuerza de voluntad huevos y sobre todo unión y amistad, el Combo resurgía de sus cenizas para llegar una vez más a ser uno de los protagonistas de un torneo en cual finalizaría 3º, pero le daría una gran cantidad de puntos teniendo en cuenta que el mejor de la temporada tendría su oportunidad a fin de año. Mismo libreto en el Apertura pero con distinto campeón y alguna que otra victoria más para el Combo fueron fundamentales para lograr un gran colchón de puntos de cara a ser uno de los que podían tener chances de ascenso. Pero en la última fecha la peor noticia llegó. Gurei ganaba y se posicionaba como mejor de la temporada, relegando a CSIS al segundo puesto. Otra vez las manos vacías.
Un rumor de jugadores truchados fue la esperanza de estos amigos luego de finalizado el torneo. FACCMA lo confirmó y el Combo entró en la final, para jugar en la A. Debido al retraso de la liga, la final se pospondría para principios de 2010, dando la posibilidad de realizar una buena pretemporada para llegar al partido más importante para este grupo de amigos defendiendo los colores bordo y celeste.
7 de marzo, ya en el 2010, cancha neutral, Mi Refugio. Mucha gente alentaba en la tribuna de Montegrande. Los mismos que unos minutos después se desahogaron gracias a Alazraki dos veces y Barco el restante, en definitiva gracias a todos, porque cuando Bebe pitó el final, fue locura máxima, alegría total, amistad en estado puro, y futbol consolidado, de la mano de estos chicos, que llevaban al club a lo más alto de FACCMA luego de luchar varias veces contra viento y marea.
Hoy con un papel más que digno en la máxima categoría de la colectividad, hacen de estos grandes jugadores, un grupo formado de hombres con fútbol y huevo, características fundamentales de este Combo, que no sería lo que es, sin su jugador estrella… la amistad.
Combo: gracias por cada alegría, por cada domingo, por cada gol, por cada derrota, por cada abrazo. Este es un homenaje para cada uno de ustedes, y cada uno de los que son parte o fueron parte del Combo, con o sin, los botines puestos.
Yairo, Ale K., Bracha, Mayo, Nano, Fer, Guido G., Fede, Joni B., Joni S., Mago, Tenis, Pela, Tanque, Mati H., Mati M., Mati A., Piojo, Barco, Sabo, Dani, Guille, Borys, Wass, Dami, Dan, Suricata, Cuchillo, Sebi, Bruno, Ari, Polo, Nico B., Bera, Chimi, Tino, Tito, Ale S.
Intenté no olvidarme de nadie, feliz dia del amigo Combo…